martes, 9 de junio de 2015

¿Conoces el EMDR?

EMDR, siglas que provienen del inglés: Eye Movement Desensitization and Reprocessing,

"Desensibilización y reprocesamiento por movimientos oculares"

Es un método descubierto y desarrollado por la doctora Francine Shapiro.

El EMDR es un abordaje psicoterapéutico innovador que acelera el tratamiento de un amplio rango de patologías fóbicas y traumáticas, en el trastorno por estrés postraumático, entre otros.



Se trata de una terapia psicofisiológica, que hace uso de técnicas utilizadas por diversas aproximaciones terapéuticas, y aprovecha los mecanismos naturales fisiológicos de nuestro cerebro para sanar los problemas de estrés y trauma.

Centrado en el tratamiento del trauma, EMDR también ha demostrado ser efectivo además en el dolor crónico, pérdida y duelo, fobias y trastornos por ansiedad, trastornos de estrés postraumático trastornos disociativos, y para mejorar el rendimiento.

Corría el año 1987 y Francine era estudiante de post grado en California, cuando se dio cuenta de que una serie de pensamientos perturbadores y sentimientos negativos se disiparon al mover los ojos de un lado a otro. Volvió a experimentarlo con ella misma y más tarde con amigos. Efectivamente, pasaba lo mismo. A partir de este hecho, elaboró la teoría de que los pensamientos perturbadores estaban correlacionados con los movimientos oculares y esto hacía que los pensamientos saliesen de su mente consciente.

Inició una investigación con sujetos traumatizados en la guerra de Vietnam y víctimas de abuso sexual para medir la eficacia del EMDR. De nuevo , este método reducía de manera significativa los síntomas del Trastorno por Estrés Post Traumático en estos sujetos. Numerosos estudios empíricos han validado estos efectos.

La fuerza del EMDR radica en que, en primer lugar, evoca el recuerdo traumático con todos sus distintos componentes: cognitivo, emocional y sensorial; y después estimula el “sistema adaptativo de procesamiento de la información” que hasta ese momento no había logrado integrar la huella disfuncional. (la huella que deja la herida traumática).

Los movimientos oculares producidos por la estimulación bilateral interhemisférica recuerdan a los que se producen espontáneamente durante el sueño REM y tienen como objeto ayudar en su tarea al sistema natural de curación del cerebro.

Durante los movimientos oculares, el sujeto da la impresión de realizar espontáneamente una asociación libre, como si los movimientos oculares, al igual que ocurre durante el sueño, facilitaran un rápido acceso a todos los canales de asociación conectados a un recuerdo traumático. A medida que activa dichos canales, el sujeto puede conectarse a los sistemas cognitivos que a su vez contienen la información relativa al presente.

Gracias a esta conexión, la perspectiva del adulto o la actual, que ya no está sometida al impacto de los peligros del pasado, acaba por hacer pie en el cerebro emocional, “reprocesando” la impresión neurológica de miedo o desesperación y sustituyéndola por otra más asumible.

Esta técnica se centra en el paciente, que permite que el terapeuta estimule los mecanismos de curación inherentes a la propia persona.


En el proceso con EMDR, el terapeuta trabaja con el paciente para identificar un problema específico que será el foco del tratamiento. El paciente describe el incidente traumático, y es ayudado por el terapeuta para que seleccione los aspectos más importantes que más lo angustian de dicho incidente. Mientras el paciente hace movimientos oculares (o cualquier otra estimulación bilateral) le vienen a la mente otras partes del recuerdo traumático u otros recuerdos. El terapeuta interrumpe los movimientos oculares cada tanto para asegurarse que el paciente esté procesando adecuadamente.

La estimulación bilateral puede ser: a) visual (el paciente mueve los ojos de un lado al otro guiado por el terapeuta); b) auditiva (el paciente escucha sonidos alternados en ambos oídos) c) kinestésica (el terapeuta golpetea suavemente y en forma alternada sobre las manos o los hombros del paciente). Esto facilita la conexión entre los dos hemisferios cerebrales logrando el procesamiento de la información y la disminución de la carga emocional.

El terapeuta guía el proceso, tomando decisiones clínicas sobre la dirección que debe seguir la intervención. La meta es que el paciente procese la información sobre el incidente traumático, llevándolo a una "resolución adaptativa". En las palabras de Francine Shapiro, esto significa:

  • a) una reducción de los síntomas;
  • b) un cambio en las creencias
  • c) la posibilidad de funcionar mejor en la vida cotidiana.

El abordaje empleado en EMDR se sustenta en tres puntos:


  1. experiencias de vida temprana;
  2. experiencias estresantes del presente.
  3. pensamientos y comportamientos deseados para el futuro.


El tratamiento puede ser desde 3 sesiones para un trauma simple hasta más de un año para problemas complejos. Aún es relativamente desconocido en España, aunque en Norte América, muchos seguros lo están incorporando para empleados de empresas.

Para muchos pacientes EMDR resulta de mayor ayuda para sus problemas que otras terapias convencionales.


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lunes, 1 de junio de 2015

¿Ansiedad?

Quién no ha oído hablar de alguien que ha sufrido ansiedad, o quién no la ha experimentado en primera persona.


Es la causa principal de demanda de asistencia psicológica y médica. En ocasiones se denomina ansiedad a un estado de nerviosismo, pero el concepto engloba mucho más que eso.



La ansiedad es una respuesta innata cuyo fin es la supervivencia. Cuando nos encontramos ante un peligro, ésta se dispara , haciendo que reaccionemos de la forma más eficaz. Por tanto, la ansiedad es beneficiosa, ya que nos ayuda a enfrentarnos a situaciones difíciles.

No obstante, puede ocurrir que nos traicione, como en situaciones que no suponen ningún riesgo pero la persona las evalúa y siente como amenazantes (subir a un ascensor) o cuando ante una situación concreta debe actuar de manera especial (un examen).

Entre los trastornos de ansiedad se encuentran las fobias, el trastorno obsesivo-compulsivo, el trastorno de pánico, la agorafobia, el trastorno por estrés postraumático, el trastorno de ansiedad generalizada, el trastorno de ansiedad social, etc. 


El miedo escénico es una forma de ansiedad social, que se manifiesta frente a grupos y ante la inminencia de tener que expresarse en público o por efecto de imaginar dicha acción. En el caso del trastorno de ansiedad generalizada, la ansiedad patológica se vive como una sensación difusa de angustia o miedo y deseo de huir, sin que quien lo sufre pueda identificar claramente el peligro o la causa de este sentimiento.

Se considera trastorno cuando el problema se ha instaurado en la vida de la persona desde hace tiempo y ésta ve su vida limitada por culpa del problema.

Cuando la ansiedad se convierte en patológica, provoca malestar significativo, con síntomas que afectan tanto al plano físico como al conductual y psicológico, entre los que cabe destacar:


  • Físicos: sudoración, sequedad de boca, mareo, inestabilidad, temblores, tensión muscular, cefaleas, parestesias, palpitaciones, taquicardias, dolor en el pecho, náuseas, vómitos, diarrea, estreñimiento, micción frecuente, problemas de la esfera sexual…
  • Psicológicos y de conducta: Aprensión, preocupación, sensación de agobio, miedo a perder el control, a volverse loco o sensación de muerte inminente…Dificultad de concentración, sensación de pérdida de memoria. Inquietud, irritabilidad, desasosiego. También, conductas de evitación de determinadas situaciones. Inhibición o bloqueo psicomotor. Por último, obsesiones o compulsiones.


Para el superarla, los tratamientos han de atacar diversos frentes. Los más comunes han sido las técnicas derivadas de la terapia cognitivo-conductual, que se focaliza en analizar , contrastar los pensamientos, muchas veces distorsionados, y reemplazarlos por otros más funcionales y adaptativos, combinado con el entrenamiento del paciente a través de técnicas de relajación, hoy en día muy de moda,  el mindfulness ( consciencia plena en el estado actual y un “dejar fluir “ las emociones y las sensaciones corporales, muy en consonancia con la meditación).

Otro tratamiento muy común cuando la ansiedad es fuerte, es la medicación. Esto supone muchas veces un tema de controversia puesto que el abuso de estos fármacos o su “toma a la ligera” puede ocasionar mayores problemas (dependencia del fármaco) si se dejan de lado otros aspectos esenciales.

La medicación sólo debería ser recomendable en casos muy graves cuando el nivel de ansiedad es tan elevado que impide el trabajo de pensamientos, físico y de conducta.Se ha demostrado que el ejercicio físico y el establecimiento de una rutina, con horarios establecidos, favorece notablemente la disminución de ansiedad.

 Dependiendo de la raíz del problema también se pueden tratar las causas o los motivos por los que puede surgir la ansiedad, a veces muy relacionada con estilos de apego en la infancia, o algún acontecimiento traumático vivido.

Además, se enseña a la persona a reaccionar de manera distinta y con herramientas nuevas para romper el ciclo de ansiedad en el que se halla inmerso/a. ( recurso muy utilizado en la terapia breve estratégica).

La ansiedad limita considerablemente y puede incluso ir de mano de la depresión, afectando terriblemente a quien la padece, pero gracias a la variedad de técnicas existentes y su adaptación a cada persona y problema, se puede superar.


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lunes, 25 de mayo de 2015

El papel de un neuropsicólogo en un accidente con conmoción cerebral, pérdida de conocimiento...

HE SUFRIDO UNA CONMOCIÓN CEREBRAL. ¿QUÉ PAPEL TIENE UN NEUROPSICÓLOGO EN ESTOS CASOS?



Muchas veces escuchamos de personas que sufren accidentes (tráfico, laboral…) o caídas fortuitas con la consiguiente conmoción cerebral y pérdida de conocimiento  sin que aparentemente se haya producido un daño cerebral.

Pero un porcentaje no es así.  A raíz de ese episodio la persona que ha sufrido la conmoción empieza a notar alteraciones.  Si dichas alteraciones están relacionadas con funciones cognitivas superiores como el lenguaje, memoria o atención la persona la relaciona más fácilmente con la conmoción.  A veces esos cambios son más sutiles de detectar cuando están relacionadas con cambios conductuales  como irritabilidad, conductas inapropiadas e incluso ansiedad o depresión.

En un artículo publicado en la revista INFOCOP la APA (Asociación de Psicología americana) recomienda acudir al neuropsicólogo tras sufrir una conmoción cerebral y notar cambios conductuales o cognitivos para realizarse una evaluación  neuropsicológica completa y realizar una intervención neuropsicológica y conductuales que permita recuperar las funciones cognitivas alteradas e incorpore a la persona a sus actividades de su vida diaria (AVD).

Si quieres saber más sobre el artículo te dejamos el enlace:
http://www.infocop.es/view_article.asp?id=5636&cat=57

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viernes, 22 de mayo de 2015

Las ventajas de saber estudiar:

Técnicas de Estudio en Alcalá de Guadaíra

Las claves: organización y técnicas de estudio.


Todos hemos oído alguna vez la importancia que tiene utilizar técnicas de estudio para optimizar las horas que se emplean estudiando. Esto abarca desde saber hacer una buena organización y planificación del material a estudiar, hasta aprender y practicar técnicas de estudio, así como saber elegir cuándo es adecuada una u otra. Por supuesto esto debe llevarse a cabo con una buena actitud frente al estudio, por lo que conseguir una cierta motivación influye muy positivamente en el desempeño que va a llevarse a cabo.

Muchos estudiantes no están acostumbrados a ir paso a paso para resolver sus tareas, ni a trabajar y elaborar lo suficiente el material que luego tienen que estudiar, por lo que tienden a leer el tema una y otra vez “memorizándolo de cabeza”. Otros realizan esquemas o resúmenes, pero sin distinguir adecuada las ideas principales de las secundarias, lo que contribuye a un ineficaz estudio de la información.

Por ello es muy recomendable instruirles en técnicas y métodos estructurados de estudio, que les permitan estudiar de una manera más organizada y eficaz, aprendiendo a su vez a re-elaborar el material que tienen delante, pues es necesario apoyarse en buenos resúmenes y esquemas para poder memorizar tanta información.

Si estás interesado en aprender técnicas de planificación y de estudio, consulta nuestro programa en la siguiente imagen.

Programa Técnicas de Estudio en Alcalá de Guadaíra


Descargar folleto
http://www.neuropsicologosensevilla.com/programa-tecnicas-estudio.pdf

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jueves, 21 de mayo de 2015

El enfoque estratégico en psicoterapia

Giorgio Nardone es el director de la Escuela de Postgrado de Psicoterapia breve estratégica, ubicada en Arezzo, Italia y de la Escuela de Formación Empresarial en Comunicación y "Problem Solving Estratégico", que se encuentra en Arezzo y también en Florencia, Italia. Él es el co-fundador, junto con Paul Watzlawick (ya fallecido) del "Centro di Terapia Strategica" donde llevan a cabo el trabajo como psicoterapeutas, profesores e investigadores. 



El enfoque estratégico en psicoterapia puede ser definido como el arte de resolver problemas complejos humanos mediante soluciones aparentemente simples

Con el aval de una rigurosa metodología de investigación empírico-experimental, el enfoque estratégico en psicoterapia representa una perspectiva revolucionaria respecto a los modelos convencionales de intervención psicoterapé́utica, y en su base se encuentra una teoría compleja y avanzada.  

Una característica distintiva de este modelo de terapia es su capacidad de producir cambios en tiempos breves (generalmente algunos meses) incluso en casos de trastornos muy enraizados y que persisten desde hace años.


Una premisa básica del enfoque estratégico es que, aunque los problemas y el sufrimiento humanos puedan parecer complejos y persistir durante años, no por esto deben requerir soluciones asimismo largas y complicadas. Cuando se habla de problemas psicológicos, de hecho, se suele pensar que son necesarias intervenciones psicoterapéuticas a largo plazo, la mayoría de las veces imaginadas como un largo y fatigoso viaje hacia el propio pasado en busca de la causa del problema.

La terapia breve estratégica, en cambio, es una intervención breve y focalizada, orientada hacia la extinción de los síntomas, por una parte, y hacia la reestructuración de la percepción que la persona tiene de sí misma, de los otros y del resto del mundo, por otra parte. En otras palabras, el objetivo principal de un terapeuta estratégico es el de resolver rápidamente los problemas y trastornos que pueden convertirse en invasivos e invalidantes, no sólo para el paciente que los sufre, sino para quienes le rodean.

Cuando nos encontramos ante una dificultad -sea personal, relacional o profesional-, la primera cosa que se nos ocurre hacer para resolver- la es utilizar una estrategia que nos parece eficaz, a menudo porque ha funcionado en el pasado para una dificultad similar.


Si la estrategia elegida funciona, la dificultad se resuelve pronto. Ocurre a veces que nuestra estrategia no funciona como habíamos esperado y esto nos lleva a intensificar ulteriormente nuestros esfuerzos en esa dirección, ya que la solución pensada nos sigue pareciendo todavía la más lógica, la más obvia, o la única posible. Pero cuanto más aplicamos esta estrategia, la dificultad inicial no sólo no se resuelve, sino que tiende a complicarse, transformándose en un verdadero problema. 

En estos casos son los mismos esfuerzos que la persona lleva a cabo en la dirección del cambio los que mantienen la situación invariable; es decir, las "soluciones intentadas" llevadas a cabo por el individuo y las personas de su entorno para intentar resolver el problema acaban por alimentarlo determinando así su persistencia.  Se centra en estas soluciones y no en etiquetas psicopatológicas. 

 Estos intentos de solución a menudo son reconocidos por la propia persona como no funcionales, pero, no obstante, no consigue hacer otra cosa, desarrollando así una profunda desconfianza en la posibilidad de un cambio en la situación problemática.

 Desde un punto de vista estratégico, pues, para cambiar una situación problemática no es necesario desvelar las causas originales (aspecto sobre el cual, por otra parte, no se tendría ninguna posibilidad de intervenir), sino trabajar sobre cómo esto se mantiene en el presente, debido a la reiterada repetición de las «soluciones intentadas» puestas en práctica.

La terapia estratégica ha resultado ser muy eficaz en numerosos trastornos:


  • los trastornos de ansiedad (ataques de pánico, agorafobia, ansiedad generalizada, fobia social, trastornos de estrés postraumático, fobias específicas, obsesiones, compulsiones, hipocondría); los trastornos de la conducta alimentaria (anorexia, bulimia, síndrome del vómito); la depresión en sus diferentes formas; los trastornos sexuales; los problemas de pareja; los problemas de la infancia y adolescencia.

Los resultados obtenidos mediante tratamientos basados sobre intervenciones estratégicas bien construidas y aplicadas por el Centro de Terapia Estratégica de Arezzo (Italia) y por sus filiales sobre más de 3.000 casos tratados muestran un 87% de casos resueltos con una media de 7 sesiones. En virtud de estas características, el enfoque estratégico representa no sólo un modelo teórico y operativo decididamente eficaz para la solución en tiempos breves de problemas clínicos (individuales, de pareja o familiares), sino también una herramienta aplicable a contextos interpersonales diferentes, como sociales, educativos, empresariales.

Para conseguir este objetivo de la manera más eficaz y rápida posible, la intervención estratégica es de tipo activo y prescriptivo, y debe producir resultados a partir de las primeras sesiones. Si esto no ocurre, el terapeuta obtiene información que le permite modificar la estrategia sobre la base de las respuestas proporcionadas por el paciente, hasta encontrar aquella más idónea para guiar a la persona al cambio definitivo de la situación problemática.

Para producir cambios el terapeuta utiliza muchas prescripciones y tareas, que el paciente tiene que poner en práctica entre las sesiones, y sofisticadas técnicas comunicativas, como el diálogo estratégico ( técnica comunicativa que conduce a la persona a elegir entre dos alternativas de respuesta para esclarecer sus alternativas de acción). 

Supone sin duda, una revolución en el mundo de la psicoterapia , considerando este enfoque como psicoterapias de tercera generación, cada vez con más adeptos. 

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martes, 19 de mayo de 2015

Principales problemas de los niños a la hora de estudiar:

Cómo prevenir el fracaso escolar.


Muchos niños presentan una serie de problemas a la hora de ponerse a estudiar, lo que se traduce en una guerra para los padres, quienes deben andar detrás de sus hijos para que empiecen con las tareas, o estar controlando continuamente que no se han distraído.



Precisamente, esos son los dos principales motivos por los que los padres acuden a un psicólogo infantil. En un primer caso están los niños que nunca quieren ponerse a estudiar, y posponen el momento alargando al máximo el periodo de descanso previo al estudio, tardando demasiado en merendar, perdiendo mucho tiempo en organizar los materiales o elegir la asignatura con la que van a empezar... Los padres de estos niños tienen que estar repitiendo continuamente la orden de “empieza de una vez a estudiar”, obteniendo siempre un “voy” por toda respuesta. Estos niños han interiorizado la asociación de “el estudio como castigo” al tener que dejar una actividad que les gusta (descansar, merendar, ver la televisión) por otra que les disgusta mucho (estudiar). En estos casos el problema suele estar asociado a pautas y rutinas inadecuadas, y se solventa creando hábitos de estudio.
Por otro lado, encontramos el caso de aquellos niños que tardan demasiado en acabar sus tareas. No tienen tantos problemas para ponerse a estudiar, pero se pasan toda la tarde haciendo los deberes o estudiando temas que podrían hacer en menos tiempo. En estos casos es donde mayor atención se debe prestar, pues suelen estar asociados a disfunción cognitiva, dificultades de aprendizaje, problemas emocionales o desmotivación escolar.

No obstante, tanto en el primer tipo de problemas como en el segundo, los psicólogos infantiles recomiendan que cuando exista cualquier sospecha de que algo no anda bien, debe acudirse a un profesional que pueda darnos las pautas adecuadas para el niño mejore y el problema no se haga cada vez mayor.

Es muy importante instaurar, desde que son pequeños, unos buenos hábitos de estudio, pues así lograremos evitar la aparición de muchos problemas asociados a la desorganización y la falta de rutinas. Ya desde la etapa infantil deben ir realizando rutinas diarias de estudio, para que vayan asociándolas como un hábito, y no como una tarea distinta. Esta responsabilidad empieza a ser enteramente de los padres, pero ya en el primer ciclo de primaria deberán comenzar a ir delegándola en los niños.  Pero sin duda es vital descartar lo más pronto posible cualquier posible retraso madurativo de algún área cognitiva, ya que cuanto antes se estimule y corrija esta necesidad, mayores probabilidades hay de evitar futuros fracasos escolares.

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viernes, 15 de mayo de 2015

Niños desobedientes.

Cómo prevenir problemas de conducta en los niños desobedientes.


Son muchos los padres que acuden a consulta porque su hijo no obedece, “se hace el sordo” ante las instrucciones y ordenes que se le dicen, tienen que llegar a enfadarse para conseguir que realice una petición sencilla, etc. También son muchos los que comunican que su hijo “siempre dice a todo que no”, tiene una conducta oposicionista, incluso a veces con cierta agresión física o verbal.

Es necesario que los niños y adolescentes, desde que son pequeños, obedezcan a sus padres, para que puedan recibir una educación adecuada.


Por esto los psicólogos infantiles recalcan la importancia de los límites, los cuales son necesarios para obtener un buen desarrollo emocional, pues les aportan seguridad.

Sin embargo, es cierto que hay etapas evolutivas en las cuales los niños buscan reafirmarse y desarrollar su autoestima, por lo que buscan independencia, saltarse las normas y no obedecer. De hecho, lo que están haciendo no es otra cosa que probar los límites, averiguar hasta dónde pueden llegar, pero no por ello se les debe permitir: en estos casos, los padres deben mostrar más firmeza para ser respetados. Deben hacerles obedecer, reafirmando su figura de autoridad, pues es ahí donde tienen la oportunidad de aprender que siempre existen unos límites y una autoridad, ya sea un profesor, un jefe el día de mañana, etc.

No obstante, a medida que crecen los adolescentes, los padres deben ser capaces de saber “negociar”, y adquirir un estilo más “democrático” a la hora de imponer las reglas. Se pueden llegar a tratos e ir dando cada vez más autonomía e independencia, pero siempre sin llegar a poner a los niños al mismo nivel que al de los adultos. Ser obedientes y respetar a la figura de autoridad son factores imprescindibles para que adquiera numerosos aprendizajes. Hoy en día hay cierta tendencia a otorgar a los niños el control, y cuando lo que están haciendo es probar sus límites, se les permite no obedecer. Así nos encontramos con niños que no entienden el porqué obedecer y no hacen algo “porque no les da la gana” o “porque tú no me mandas”.  Esto no favorece ni la obediencia ni el aprendizaje. Cuando este tipo de conductas se permiten, van a más. Los padres acaban por perder el control, el cual toman sus hijos.

Los padres deben tomar las decisiones adecuadas para sus hijos, y hacer que éstas se cumplan, enseñándoles además a respetar estas decisiones. Siempre primero se debe intentar que entiendan el por qué de estas decisiones, e intentar favorecer un adecuado estilo de comunicación y negociación, pero cuando son muy pequeños o cuando están probando sus límites, no se debe ceder el control y ser permisivo, sino imponer esa decisión.

Por todo ello, los psicólogos infantiles recomiendan que en el momento en que creas que este tipo de conductas en tu hijo han ido a más, y temas llegar a perder el control, no dudes en acudir a un profesional que te oriente con las pautas más adecuadas para solventar esta situación.

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