Recomendaciones para organizar el curso escolar
Con la vuelta al cole vuelven también los problemas escolares que quedaron sin resolver el curso pasado.
Empezar este año con unas nuevas pautas y rutinas pueden ayudar a que los niños
y niñas que presentan algunas dificultades
a la hora de estudiar aprendan a desarrollar un hábito de estudio que les facilite desempeñar el curso escolar.
El simple
hecho de organizarse y planificarse hará que el niño sea más eficaz en su estudio, pero si además conseguimos que adquiera el hábito de estudiar, necesitará menos esfuerzo
para comenzar el rato de estudio, pues realmente habrá logrado “acostumbrarse”
a que toca estudiar.
¿Cómo creamos un hábito?
Para ello
debemos tener en cuenta tanto el tiempo como el lugar de estudio:
Tiempo de estudio:
El estudio debe ser diario
(entre semana) y realizarse siempre a la
misma hora para crear un hábito. Es muy importante coger una rutina por las
tardes, procurando que todas las actividades a realizar sean siempre a la misma
hora, pues con esto se crea en nuestro organismo un hábito.
Además es aconsejable que el tiempo dedicado al estudio sea previo a las
actividades extraescolares o tiempo de ocio. De esta manera, la misma actividad
puede servir de refuerzo al estudio, y servirá realmente para despejarse, ya
que no estará pensando en las tareas escolares que aún le quedan por hacer.
Lugar de estudio:
Para ayudar a crear el hábito, el lugar de estudio debe ser siempre el mismo. Lo recomendable es
tener una habitación de uso exclusivo, que no sea un lugar de paso en el que
estén entrando y saliendo otras personas, que esté bien ventilada, sin
demasiado frío ni calor, sin ruidos ni otras distracciones (televisión, juegos,
móvil…), que posea una buena iluminación (con una lamparita o flexo que entre
desde la izquierda si se es diestro o desde la derecha si se es zurdo), con una
mesa amplia y despejada y una silla con respaldo y cómoda, aunque no en exceso,
para evitar que el niño tienda a relajarse demasiado o incluso a adormilarse.
Dos aspectos fundamentales a tener en cuenta para favorecer la concentración de un niño con TDAH son:
1)
No tener ningún objeto, juguete, decoración, etc. a la
vista. Es decir:
la mesa de estudio no debe dar a una ventana, sino a una pared vacía, sin
objetos, cuadros, juguetes… La mesa debe estar completamente despejada,
teniendo a un lado todo aquello que no se esté usando en ese mismo momento,
fuera del campo visual.
2)
Tener en la misma habitación todos los materiales que va a tener que usar durante la sesión de estudio,
para evitar estar levantándose y moviéndose por toda la casa cada vez que
necesite algo distinto. Para conseguir aun así tener la mesa despejada, pueden
ponerse el resto de asignaturas y materiales en una mesilla detrás o a un lado,
fuera del campo visual.
Otros consejos:
-
Acostumbrar
al niño a que antes de que sea la hora de estudiar debe beber agua, ir al baño,
etc., no pudiendo ir durante el tiempo de estudio.
-
Planificar
todo lo que va a llevarse a cabo en el estudio de esa tarde, y preparar todo el
material para no distraerse después buscando cosas que le hagan falta.
-
Despejar la
mesa siempre antes de empezar a estudiar.
-
Es muy
importante que aprenda a mantener en orden todos los materiales escolares, y
que se acostumbre a guardarlos siempre en el mismo lugar.
Palabras claves: hábito de estudio,
TDAH, problemas escolares, dificultades al estudiar, mejorar la concentración
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